jueves, mayo 10, 2007

Condena de muerte


Un hombre siempre escribe su condena de muerte, tal vez sea por negarse al amor o por dejar ir a la felicidad.
Se para frente al pelotón con la bravura de un guerrero histórico, pero en lo más profundo de su corazón ansia seguir viviendo y con la esperanza de encontrar nuevamente aquel amor al que negó, pero ya es tarde, se encuentra parado frente a seis hombres sin rostro, cargados del plomo que guardará su pecho. El calor del medio día ciega al mortal, un leve aroma recuerda el perfume de ese amor al cual negó, el polvo en sus pies traspasaron las largas botas y pareciera estar descalzo, los minutos son largos, parecen multiplicarse por 100. Se dió la orden, el guerrero nunca desifró las palabras exactas, que fueron las que habrieron las puertas del más alla, su pecho recibio el ensordecedor estruendo de los fusiles y sintió que su corazón nunca terminaria de latir, cerró sus ojos y recordó el primer beso oculto con aquel guerrero que fue su amor y ya no sintió dolor.

2 comentarios:

 kotto dijo...

esta buenisimo el post victhor
te mando un abrazo...buen fds

diablo enlatado dijo...

interesante

hace mucho que el sol no me quema